George Bataille y Fu-Tchu-Li

La escalofriante historia del suplicio chino llamado Leng-Tché (descuartizamiento en 100 trozos) la leí vagamente comentada por los personajes de Rayuela De Cortazar quienes hablaban de la espantosa foto como un objeto de culto, inimaginable aún para el lector atento. Posiblemente Cortazar haya leído las Lagrimas de Eros de George Bataille donde junto a una extensa iconografía que incluye esta foto vincula el erotismo y la muerte en la mirada del arte, ciertamente cuando Burke habló de lo sublime y lo bello dentro del arte dando reconocimiento formal a la entrada del misterio y el horror en el arte a través del romanticismo y lo gótico, nunca imagino como el arte neogótico de fines del siglo XX y principios del XXI buscaría la imagen del horror, baste recordar a Francis Bacon y su pervasiva influencia en la escenografía de 'The Silence of the Lambs" (el silencio de los inocentes). El rostro extático de Fu-Tchu-Li se debió posiblemente al uso de opio por parte de los verdugos, el castigo se debió a que asesinó al principe Ao-Han Ovan y sin duda recuerda el suplicio público de un regicida frustrado
francés en 1757 descrito por Foucault en "Vigilar y Castigar" un tal Damiens como describe su condena : " Se encendió el azufre, pero el fuego era tan pobre que solo la piel de la parte superior de la mano quedó no más que un poco dañada. A continuación su ayudante, arremangado por encima de los codos, tomó unas tenazas de acero hechas para el caso... y le atenaceó primero la pantorrilla de la pierna derecha, después el muslo de ahí pasó a las dos mollas del brazo derecho, y a continuación las tetillas. A este oficial, aunque fuerte y robusto le costó arrancar los trozos de carne que tomaba con las tenazas dos y tres veces del mismo lado, retorciendo, y lo sacaba en cada porción dejaba una llaga del tamaño de un escudo de seis libras.
" Después de estos atenaceamientos, Damiens, que gritaba mucho aunque sin maldecir, levantaba la cabeza y se miraba. el mismo atenaceador tomó con una cuchara de hierro del caldero mezcla hirviendo, la cual vertió en abundancia sobre cada llaga. Acontinuación, ataron con soguillas las cuerdas destiandas al tiro de los caballos, y despues se amarraron aquéllas a cada miembro a lo largo de los muslos, piernas y brazos... los caballos dieron una arremetida, tirando cada uno de un miembro en derechura, sujeto cada caballo por un oficial. Un cuerto de hora después, vuelta a empezar, y en fin, tras de varios intentos, hubo que hacer tirar los caballos de esta suerte :
los del lado derecho a la cabeza, y los de los muslos volviendose del lado de los brazos por las coyunturas. Estos tirones se repitieron varias veces sin resultado.. después de dos o tres tentativas, el verdugo samson y el que lo había atenaceado sacaron cada uno un cuchillo de la bolsa y cortaron los muslos por su unión con el tronco del cuerpo. Los cuatro caballos , tirando con todas sus fuerzas, se llevaron el brazo derecho primero, y el otro después posteriormente fue arrojado a la hogera"
Las monarquías ante el temor de perder su poder hacían público su capacidad de horrorizar y ensañarse en el castigo, las dictaduras latinoamericanas llevaron estos horrores a cámaras secretas tal como lo hicieron los nazis lo cual permite al revisionismo reconstruir una historia donde nada ha sucedido, donde las víctimas son tildadas de mentirosas. En Chile el revisionismo es avalado por el poder monopólico de una prensa fascista y generaciones de periodistas cómplices, también tienen su nucleo de historiadores revisionistas.Y tal como los revisionistas del holocausto parten cuestionando cifras más o cifras menos para luego negarlo todo.